Teniendo presente como meta ser buenos hijos de Dios, parte de ser agradecidos con Él consiste en poder representar los valores Cristianos de la mejor manera posible. Comencemos este nuevo mes con una mirada renovada sobre la Gloria del Señor.

“Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia.” Hebreos 12:28

Primero que nada debemos recordar que lo más importante es perdonar a los demás. Teniendo presente como meta ser buenos hijos de Dios, parte de ser agradecidos con Él es compartir con otros el testimonio de lo que hace por nosotros. No se puede aceptar su perdón si no se hace lo mismo por los demás. Cuando perdonamos a los que nos ofenden también estamos honrando y agradeciendo a Dios.

“no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él.” Efesios 1:16-17

Pasa tiempo con Cristo para mejorar tu comunicación con Él a través de la oración. Dedica un momento especial en donde puedas hablar con Dios y leer su palabra, donde encontrarás cientos de enseñanzas que ilustran cómo ser agradecido, de esta manera lograrás una relación íntima con Él y podrás decirle lo mucho que significa para ti dar las gracias por todo lo que tienes y por todas las cosas que Él hace. Este tiempo especial debe ser diario y personal: una reunión especial entre Dios y tú.

“Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un sólo cuerpo; y sed agradecidos.” Colosenses 3:15

Ofrécele tus dones y talentos, muéstrale lo que has hecho con las virtudes y habilidades que Él te ha dado. Las habilidades que tenemos provienen de Dios, y qué mejor forma de agradecerle si no es siendo útiles para Él. Nuestro Creador puede darnos aún más capacidades de las que nos imaginamos si tan sólo se lo pedimos y somos agradecidos con Él.

“Bendeciré a Jehová en todo tiempo; su alabanza estará de continuo en mi boca.” Salmos 34:1

No te concentres en todo aquello que es negativo. Todos sabemos que Dios no nos promete una vida libre de problemas y malos ratos; en cambio, su promesa es estar con nosotros cuando en todo momento y ocasión en que nosotros lo necesitemos. Es por eso que debemos aprender a ver el lado bueno de la vida y disfrutar cada momento teniendo presente que Dios siempre está a nuestro lado.