Momentos y situaciones que se nos ponen enfrente para poder sanar y evolucionar en nuestra espiritualidad. Toma algunos ejemplos de los siguientes versículos que te ayudarán a sanar.

“Una voz clama: Preparad en el desierto camino al SEÑOR; allanad en la soledad calzada para nuestro Dios. Todo valle sea elevado, y bajado todo monte y collado; vuélvase llano el terreno escabroso, y lo abrupto, ancho valle. Entonces será revelada la gloria del SEÑOR, y toda carne a una {la} verá, pues la boca del Señor ha hablado.” Isaías 40:3-5

Desde el momento de la creación Dios estableció las mismas reglas y privilegios para todos y todas por igual. Esto nos permite tener una base sólida para la construcción de nuestro camino espiritual, dándole un lugar privilegiado a las verdades manifestadas en las santas escrituras de la Biblia.

Cada una de las enseñanzas allí descritas, nos confiere un mapa de ruta del recorrido de una vida abocada a la Fe. Es claro también comprender que cada ser humano, cada hermano y hermana, es único y diferente. En cada uno de ellos encontraremos rasgos distintivos que nutrirán nuestra espiritualidad así como lo hace cada pasaje bíblico y cada palabra que provenga de nuestro Padre Celestial. 

“El Señor iba delante de ellos, de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarlos, a fin de que anduvieran de día y de noche.” Éxodo 13:21

Muchas veces nos encontramos leyendo un pasaje de la biblia o recibiendo un consejo de alguien que nos conoce bien. Nos detenemos a meditar o intentar poner en práctica lo que interpretamos o lo que nos llega de su mensaje.

Es inmediata la pregunta que se dispara en nuestra cabeza “¿cómo paso de la teoría a la práctica?” Lograr poner en acción las palabras que provienen del exterior de nuestro ser se compara con ese muro o ese salto de superación al vacío que tanto anhelamos. Sin importar de dónde seamos, qué tipo de vida llevamos, nuestra clase social o los problemas o errores cometidos, Dios quiere que te superes. Quiere tu libertad espiritual y emocional.

Desea más que nadie que tu corazón sane esa herida que te tiene atado a la voluntad de la oscuridad y te inmoviliza, generándote incertidumbre y dolor. Debemos entonces comprender que existen acciones y elementos que compartimos entre Cristianos y devotos a Dios.

La oración, la biblia y la Fe son la tríada de elementos que nos amalgaman y nos unen en el vínculo espiritual. 

“Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús”. Filipenses 1:6

Estaremos incorporando a toda hora y lugar distintos tipos de mensajes que nos llegan desde el Cielo. Nuestro Padre Celestial promueve y establece nuevas formas de hacer su voluntad en la Tierra.

Así como el paso de su Hijo Jesús nos vino a mostrar un camino de bendiciones y de milagros, los mensajes y visiones que recibamos, serán el reflejo de la Gracia de Dios, de su anhelo y por sobre todo del cumplimiento de la misión que nos tenga preparada para que sanemos y confiemos desde el corazón.

En oración le pediremos por su guía, que nos brinde su luz y su paz para que podamos sortear las cadenas que nos atan con el pasado.

El deseo del Señor es que su gracia y su iluminación nos llegue a los rincones más profundos del alma, desterrando a nuestro antiguo ser para poder darle la bienvenida al nuevo y renovado espíritu.