Las generaciones más jóvenes son el futuro, son ellos quienes deben continuar con el mensaje de Dios día a día. Conoce el modo de acercarte a estos seres de luz con estos consejos.

“Sucederá entonces que cuando muchos males y tribulaciones vengan sobre ellos, este cántico declarará contra ellos como testigo, pues no lo olvidarán los labios de sus descendientes; porque yo conozco el plan que ahora están urdiendo antes de que los traiga a la tierra que juré darles.” Deuteronomio 31:21

Tienen una visión distinta a la de los mayores. Recordemos que somos nosotros los adultos quienes inculcaremos a las generaciones más jóvenes los valores a seguir, no solamente mediante la palabra sino también mediante el ejemplo. Que sea entonces Cristo nuestra palabra y ejemplo para ellos.

“Tal como viste que una piedra fue cortada del monte sin ayuda de manos y que desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha hecho saber al rey lo que sucederá en el futuro. Así, pues, el sueño es verdadero y la interpretación fiel.” Daniel 2:45

Son el futuro. Es importante comprender que son ellos quienes serán los adultos del futuro cuando nosotros ya no estemos, entonces el mensaje que reciban será primordial para cuando ellos ocupen el lugar de adultos. Consideremos este punto con mucho cuidado.

“Ahora bien, un día antes de la llegada de Saúl, el Señor había revelado esto a Samuel diciendo: Mañana como a esta hora te enviaré un hombre de la tierra de Benjamín, lo ungirás para que sea príncipe sobre Mi pueblo Israel, y él librará a Mi pueblo de la mano de los filisteos. Porque yo he visto la aflicción de Mi pueblo, pues su clamor ha llegado hasta Mí.” 1 Samuel 9:15-16

Merecen la oportunidad de ser escuchados. Porque sus voces tienen el mismo valor que las nuestras, porque Cristo nos ama a todos por igual, los jóvenes necesitan ser escuchados pero, más aún, somos nosotros los que necesitamos escuchar sus ideas y su particular visión del mundo.

“Después de haberse marchado ellos, un ángel del Señor se le apareció a José en sueños, diciendo: Levántate, toma al Niño y a su madre y huye a Egipto, y quédate allí hasta que yo te diga; porque Herodes va a buscar al Niño para matarle.” Mateo 2:13

Son prácticos. Por eso es su trabajo tejer la red de amor con la que Dios pretende cubrir el mundo entero. Ellos son el mensaje de Cristo que mantiene viva la esperanza de un cambio a nivel mundial.

“Pero ahora os exhorto a tener buen ánimo, porque no habrá pérdida de vida entre vosotros, sino sólo del barco. Porque esta noche estuvo en mi presencia un ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo, diciendo: No temas, Pablo; has de comparecer ante el César; y he aquí, Dios te ha concedido todos los que navegan contigo.” Hechos 27:22-24

Saben cómo lograr lo que se proponen. Recordemos que ellos no cuentan con las inseguridades nuestras, entonces debemos escucharles y acompañarles en lo que se propongan, puesto que seguramente lograrán llevarlo a cabo.

“Por tanto, velad, porque no sabéis en qué día vuestro Señor viene. Pero comprended esto: si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora de la noche iba a venir el ladrón, hubiera estado alerta y no hubiera permitido que entrara en su casa.” Mateo 24:42-43

Cuentan con unidad. La dinámica social de los jóvenes es mucho más extrovertida y libre de prejuicios que la de los adultos, y existe entre ellos un nivel de unidad digno de replicarse en el mundo.