“En Cristo Jesús Dios es todo generosidad para con nosotros, por lo que quiere manifestar en los siglosvenideros la extraordinaria riqueza de su gracia”

Efesios 2-7

El olvido y el perdón


Si continuamos viviendo constantemente dándole foco al consumo efímero y canalizamos las energías, acciones y decisiones únicamente en nuestro ser, terminaremos aislados y olvidados. El desinterés por el Espíritu Santo, desemboca en una desconexión entre nuestro corazón y nuestro ser. Al generar deseos materiales, se relativiza todo el amor y la sensación de bondad que genera el poder ayudar a un otro. Comprender sus necesidades y permitirnos sentir algo más profundo que una simple retribución fugaz.Desde nuestra participación activa en la Fe, mediante la oración, el agradecimiento diario a nuestroPadre Celestial, mantendremos su luz encendida y podremos replicarla a lo largo de nuestrasgeneraciones venideras toda su gracia y la generosidad de haber enviado a su hijo Jesús a salvarnos.