“Así también la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta”

Santiago 2:17

La fe y la vida


Lo que se expresa en esta cita hace referencia a que tener fe no es sólo una frase sin sentido. No accedemos a ella sólo por cortesía con nuestros padres, o con nuestras instituciones, sino que la fe debe elegirse y sentirse. Si nos limitamos frente a una posibilidad de ayudar a alguien y sólo le deseamos el bien sin hacer nada al respecto, esa es una creencia vacía.Debemos reconocer nuestra fe, entenderla, evaluándola desde nuestro interior, sintiéndonos hijos de Dios, y viviendo a través de la fe pero también de la acción. Y las obras de fe no son sólo con el prójimo sino también en nosotros mismos. Es una obra de fe genuina luchar contra malos pensamientos, o trabajar a diario en ser personas humildes en un mundo muy ambicioso, y así existen infinitas maneras de hacer vivir nuestra fe.