Todos los días al despertar tenemos que ser conscientes de las oportunidades que tenemos para evolucionar espiritualmente. Encuentra en el siguiente artículo maneras de agradecer a diario cada oportunidad presente.

"Compórtense sabiamente con los que no creen en Cristo, aprovechando al máximo cada momento oportuno. Que su conversación sea siempre amena y de buen gusto. Así sabrán cómo responder a cada uno." Colosenses 4:5-6

Cada día que comienza tenemos en nuestro podar una nueva oportunidad para acercarnos al Señor. El Espíritu Santo te brindar la energía que necesitas para abrir nuevos caminos y dejarte conducir por sus milagros. 

Si logramos comprender y agradecer cotidianamente todo el amor que recibimos por parte de nuestro Padre Celestial, se producirá con el tiempo, la dedicación y la paciencia un equilibrio espiritual superior.

Intenta conectar con tu voz interior. Con ese ser que se encuentra dentro de tí y que anhela encontrar bendiciones infinitas producto de la Fe y el amor por El Señor.

"En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas." Gálatas 5:22-23

Libera esa energía intena que tienes almacenada. Aprende a tomar aquello positivo que te rodea y está a tu alcance. Todas estas decisiones te permitirán conectar con el Espíritu Santo.

Si comenzamos a destinar más foco y perseverancia en la construcción de un vínculo más profundo con nuestro Padre Celestial, resultará la clave que nos llevará hacia una vida plena. 

Comprender que en cada día se asoma una oportunidad de cambio para todo aquello que necesitemos y querramos modificar, podemos apoyarnos en Dios. Contar con el Padre Celestial para salir adelante y evolucionar.

"Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia." Salmo 46:1

Aprender a cuidar nuestra relación con El Señor y con nuestros pensamientos es un camino largo pero fructífero. En el horizonte podremos encontrar múltiples caminos que nos ayudarán a sanar.

Estar atento a ciertas personas que puedan acercarnos nuevas formas conectar con la Fe que nos  ayudará a abrir el abanico de posibilidades hacia alternativas más ricas y profundas de incorporar la luz de Dios en nuestro ser interior.

Potenciar lo bueno y transformar aquello que ya no nos hace tan bien, nos hará crecer como personas, entendiendo que la marcha firme hará duraderos todos aquellos aprendizajes que incorporemos del Señor.

"Tú me cubres con el escudo de tu salvación, y con tu diestra me sostienes; tu bondad me ha hecho prosperar. Me has despejado el camino, así que mis tobillos no flaquean." Salmo 18:35-36

Si aceptamos que la vida es cambio constante, estaremos en condiciones de aceptar que junto a Dios, nos encontraremos en constante transformación.

Como un árbol que muda de follaje al cambiar de estación, solemos mudar también de pensamientos, emociones y afirmaciones en cada momento de nuestro tránsito por el sendero del Espíritu Santo. 

Este tipo de crecimiento, hace que atravesemos los procesos de sanación y amor en armonía junto a la Fe. Recibir con apertura las nuevas oportunidades, y estar expectantes a los que vendrá, nos permitirá avanzar hacia nuevos rumbos donde el Padre Celestial nos aguarda. Déjate sorprender y conserva la esperanza y la curiosidad por todas las bendiciones que el Señor tiene listas para tí.