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Tenemos un poder inmenso de atracción. Debemos tenerlo más presente y ejercitarlo día a día. En el siguiente artículo te contaremos cómo activar esta capacidad que reside en tí.
“El Señor te protegerá; de todo mal protegerá tu vida. El Señor te cuidará en el hogar y en el camino, desde ahora y para siempre.” Salmos 121:7-8
Confía en Dios todopoderoso. Tengamos bien presente que hay un momento en nuestras vidas en el que tenemos que recordar que hay cosas que escapan a nuestros deseos.
Es en esos momentos cuando debemos confiar en el Señor con mucha más fuerza, recordando que Él nos ama y su plan para nosotros siempre será para bien. Fortalece hoy tu Fe mediante la oración y gana más confianza en el Señor.
“Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.” Efesios 5:15-16
El mundo no está en contra tuyo. Ten bien presente estas palabras, ya que muchas veces pensamos que el mundo se ha complotado contra nosotros; cuando en realidad somos nosotros los que tenemos una visión distorsionada.
Al darle vital importancia al más mínimo de los problemas, comenzamos a creer que todo gira alrededor nuestro y de esa manera el mundo se organiza para hacernos la vida imposible. Sé solidario para trabajar la empatía.
“Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor.” Colosenses 3:23-24
Plantéate objetivos. Muchas veces, las metas a corto plazo son de gran ayuda cuando nos sentimos desorientados con respecto a qué camino seguir.
De esa manera nos abocaremos al todo teniendo ese objetivo en mente: Pídele consejo al Señor mediante tus oraciones; lee atentamente su palabra, que hace las veces de guía para nuestras vidas; sigue su ejemplo: sólo en Él triunfarás.
“Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; él es mi herencia eterna.” Salmos 73:26
Sé agradecido. Es muy importante no olvidar ser agradecidos en nuestras oraciones, sólo de esa manera podremos tener presente dejar de lado nuestro egoísmo y evitar orar tan sólo para pedir y pedir.
Agradecer es la piedra angular de la humildad. Pero también debemos procurar ser agradecidos en nuestras acciones, porque recordemos que de nada sirve recordarlo en nuestras oraciones si no lo practicamos con el ejemplo. Recuerda: En la palabra nos podrán elogiar, pero en el ejemplo nos imitarán.
“En el agua se refleja el rostro, y en el corazón se refleja la persona.” Proverbios 27:19
Ama, porque eso es lo más importante que Dios nos ha enseñado mediante su palabra y sus actos. Él es el ejemplo a seguir en esta vida: contamos con la más completa guía que es su palabra, la que nos aconseja para bien en cada situación por la que atravesemos.
Nos reconforta en momentos difíciles y nos instruye cuando nos sentimos desorientados. Pero lo más importante de todo es que no existe nada sin amor, y que nosotros no somos nada sin amor.