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Confiando Positivamente en el Corazón

Tenemos que tener el corazón predispuesto para recibir la iluminación necesaria para evolucionar. Conoce en el siguiente artículo la manera de formar una actitud positiva.

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“Confío en Dios y alabo su palabra; confío en Dios y no siento miedo. ¿Qué puede hacerme un simple mortal?” Salmos 56:4

Por momentos podremos sentirnos de un modo decaído. Con algún decaimiento de energía o de espíritu. Es en estos momentos que debemos fortalecer nuestro ser interior, darle ejercicios a nuestro corazón para que pueda acercarse con Fe al Espíritu Santo.

Crear día a día un renovado vínculo con el Señor y su poder de sanación. Sentiremos alivio en nuestros corazones. Relegar la duda y albergar la esperanza como instrumento de transformación actual en tu ser.

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“En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.” Juan 1:1

Inténtalo cotidianamente: reconectar con tu equilibrio emocional y tu corazón se abrirá como una flor hacia el Padre Celestial. Armar un espacio y un tiempo adecuado para darte a la oración, para poder renovar tus aprendizajes en la Biblia y por qué no, hasta para poder renovar tu voto de Fe con el Señor. Sentirás inmediatamente como una energía especial emerge de tí, sin realmente haber hecho más que sincerarte con Dios.

Es el momento de eflexionar sobre el momento que estás viviendo actualmente. Si realmente quieres seguir por este camino o necesitas detenerte y pensar mejor. Las oportunidades y el perdón son el puente fundamental para poder sanar el corazón hoy mismo.

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“Jesús le respondió: -Escrito está: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” Mateo 4:4

La comunicación es la clave de toda relación. Ya sea contigo, con el Espíritu Santo, con colegas, amigos, familiares y personas queridas. Se alimenta, se abona con decisiones, ejemplos y con la palabra. Poder decir y acompañar lo que pensamos con nuestros hechos, será una demostración clara y justa para el Padre Celestial.

Dando la ayuda que requiera la persona que se nos acerque, o muchas otras veces, pidiendo de esta ayuda, para que otro ser de luz, instrumento del Señor, nos alivie del dolor y de la angustia de encontrarnos lejos del sendero de luz.


“Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.” Mateo 7:24

Para poder superar estos obstáculos que se te presentan actualmente, podemos realmente pedir ayuda al Señor en oración y comenzar un camino de superación cotidiana.

Realmente aparecerá la oportunidad sobre nuestros hombros, de poder accionar y realizar las cosas de modo ordenado, conscientes y alineados con el Espíritu Santo. 

Con paciencia, determinación y un corazón abierto, en escucha activa, podremos capitalizar todo aquello negativo y transformarlo en algo positivo para aprender y crecer en espíritu.




Versículo diario:


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