Este es el momento para realizar esa sanación necesaria en tu corazón. Explora el siguiente artículo y averigua cómo hacerlo.

“Cuando tres amigos de Job, Elifaz temanita, Bildad suhita y Zofar naamatita, oyeron de todo este mal que había venido sobre él, vinieron cada uno de su lugar, pues se habían puesto de acuerdo para ir juntos a condolerse de él y a consolarlo.” Job 2:11

Sumar al Señor como nuestro compañero de vida nos permitirá sentirnos siempre en compañía. Nos ayudará a comprender situaciones y contextos que se nos presenten en nuestro día a día. 

Cuanto más nos podamos acercar al Espíritu Santo, mayor será la luz en nuestros corazones. Más equilibrado y en paz se sentirá nuestro ser interior y nuestra espiritualidad se conectará de un modo muy profundo con la Fe.

Jesús nos mostró como junto a sus discípulos, como Hijo de Dios, lograría liberarnos del temor y de los pecados, por eso será para siempre nuestro amigo y compañero de vida.

“Cuando no hay buen guía, la gente tropieza; la seguridad depende de los muchos consejeros.” Proverbios 11:14

La muestra de amistad para con Cristo por dar su vida por cara hijo e hija del Señor, fue un acto superior de amor y entrega.

Su ejemplo está alineado con su espíritu, revelando la verdad de la Palabra de Dios en nuestro corazón.

Siempre el Padre Celestial estará observándonos de cerca, ayudándonos y mostrándonos el camino de iluminación por medio de personas, ejemplos y situaciones de vida.

“Dos son mejor que uno, porque sacan más provecho de sus afanes. Si uno de ellos se tropieza, el otro lo levanta.” Eclesiastés 4:9-10

Encontraremos en la Biblia muchos ejemplos donde se demuestra como Dios nos guía como sus fieles seguidores y seguidoras. Comprendiendo que como hijos e hijas del Señor, tenemos mucho por aprender y mucho por dar a quienes más lo necesiten.

De esta manera, dando el ejemplo con la acción, estaremos conectando la Palabra Sagrada y nuestras decsisiones de vida. Permaneceremos en comunión con el Espíritu Santo siempre y cuando tengamos nuestro corazón abierto y dispuesto a celebrar la vida.

“No tengas nada que ver con gente violenta, ni te hagas amigo de gente agresiva, para que no imites su conducta y tú mismo te tiendas una trampa.” Proverbios 22:24-25

En oración tendremos un confidente y consejero cerca.

En el Señor podemos confiar nuestros más profundos miedos y necesidades. Los secretos podrán salir sin pudor ni heridas, ya que desde el mismo momento que nos abrimos hacia Dios, estaremos sanando esas heridas profundas que no nos dejan estar en equilibrio y paz mental.

Si anhelas un excelente consejero, en alguien que da su palabra como testimonio de ello, entonces es momento de conectarte profundamente con el Espíritu Santo.