Si podemos poner en práctica el entendimiento del prójimo con una mirada integradora del respeto, estaremos cada vez más cerca del amor total. Aprende en el siguiente artículo a poner en práctica las decisiones basadas en el respeto.

“Mas él pasó por en medio de ellos, y se fue.” Lucas 4:30

El respeto, es la base del entendimiento humano. Por este motivo es que debemos tener una buena predisposición para enfrentamos día a día a los momentos y situaciones que se nos presentan.

En estos casos es importante recordar que necesitamos estar en paz, recordando el amor que siempre recibidos del Señor, intentando replicar el mensaje de Jesús en cada instante que podamos.

Si llegamos a una situación límite y nos arriesgamos a contestar agresiones que son manifestadas sin sentido, debemos alejarnos en ese momento y replantearnos seriamente lo que ocurrió, preguntándole a Dios cómo obrar en ese momento en particular.

“Pues aún los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos.” Lucas 12:7

Si logramos tener un vínculo que nos permite tener una relación más estrecha con el Señor, podremos ver dentro de nuestro corazón y encontraremos las respuestas para comprender lo que debemos hacer. El Espíritu Santo nos proveerá del consejo divino para retomar la paciencia, la escucha activa, el entendimiento con nuestros seres queridos, amigos, amigas, compañeros y compañeras de trabajo.

Cada ser que aparezca en nuestro sendero nos ayudará a comprender nuestro destino de Fe. Jesús nos amó tanto que entregó su vida por nosotros. La sabiduría de Dios se encuentra en todo lo que tenemos a nuestro alrededor.

“Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.” Jeremías 33:3

Sin importar cómo se nos presente una persona o una situación, es en aquellos momentos en los que debemos confiar en que siempre -tarde o temprano- hay una solución, y la Biblia nos enseña que si buscamos una alternativa, la hallaremos.

El consejo de Dios ante estas situaciones, lo encontraremos definitivamente a través de la oración. Por eso es importante hacernos del tiempo diario para reunirnos con el Padre Celestial y aprender de su sabiduría divina.

Recordemos que orar es la mejor vía de comunicación con Dios, encontraremos la mejor versión nuestra en cada paso que demos hacia la luz del amor, el respeto y la esperanza de que todo será mejor ahora que estamos en sus manos.

“Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.” Romanos 12:18

Tratar con distintos seres humanos en los ámbitos del trabajo, la universidad o muchas veces en un evento social, nos pone a prueba. Nos ubica en un lugar de comprensión y adaptación constante, comprendiendo que esas personas tienen también sus aprendizajes y que debemos intentar guiarlos.

Debemos adoptar la manera de vivir en paz, ya que nuestro ejemplo de amabilidad y cooperación fácilmente puede “contagiar” a aquella persona que nos observa y nos rodea en este momento de la vida.

El Señor así lo indicó en las Sagradas Escrituras, pero también enviando a Jesús a la Tierra, con el plan de realmente conectar al Espíritu Santo con lo cotidiano, con lo real y constante, la vida de cada ser en este planeta.