¡Descarga la app!

Accede a más contenido como este.

“Pero si esperamos lo que todavía no tenemos, en la espera mostramos nuestra constancia”

Romanos 8:25

El fruto del espíritu


La esperanza por naturaleza surge en la ausencia, en el anhelo de algo que aún no está, y es posible para nosotros ser pacientes gracias al fruto del espíritu, ya que es éste el que nos brinda paz y paciencia en medio de las tormentas. Es el poder que tiene Dios de calmar nuestros corazones para que podamos afrontar las situaciones con esperanza, ya que la esperanza significa vida, posibilidad. El espíritu es el que interfiere cuando deseamos orar, y no sabemos cómo hacerlo.

Publicidad

Seremos escuchados a través de nuestro deseo de conectarnos con Dios. En esos momentos es cuando demostramos nuestra constancia al intentar ser perseverantes, insistiendo en la paciencia, y confiando en la voluntad de Dios; entendiendo que todas las cosas cooperan para bien.